Estaba la beata un día
Enferma del mar de amor
El que tenía la culpa
Era el fraile confesor
Chiribiribiribiri
Chiribiribiribón
A la beata le gustaba
Con el fraile la cuestión
No quería que le pusieran
Zapato ni zapatón
Sino las sandalias viejas
Del fraile confesor
No quería que le pusieran
Mortaja ni mortajón
Sino la sotana vieja
Del fraile confesor
No quería que la velaran
Con vela ni con velón
Sino con la vela corta
Del fraile confesor